Una depresión severa habría sido el detonante del asesinato de Stephanie por su expareja en Ibagué

por Daniel Garcia

El abogado reveló detalles inéditos de esta pareja que deja una menor de 11 años y presuntos malos tratos de la víctima y su suegra hacia el victimario, quien estaba recibiendo atención psicológica.

Muertos feminicidios

Tras el caso de feminicidio que se presentó en Ibagué el pasado fin de semana, se conocen detalles de la intervención del abogado de la defensa, David Palacio, el cual reveló la relación compleja que tenía el victimario con su expareja.

Inicialmente, el jurista dio a conocer la afectación que le produjo a Julián Avellaneda el terminar con su compañera Stephanie Katherine Bocanegra, empezó a asistir a recibir atención psicológica desde el pasado mes de septiembre y tenía una cita mensual.

“Avellaneda presenta una alteración grave del estado mental como depresión severa a causa de una separación con su ex compañera sentimental, la señora Katherine Bocanegra, al parecer por haber quedado desempleado, su esposa decide terminar con la relación, considerando que su compañero sentimental no le aportaría nada económicamente”.

Asimismo, sostuvo que dicha pareja tenía una hija y tras haberse quedado sin empleo y al haber terminado la relación, el trato hacia de la víctima a su excompañero no era el mejor, lo que empezó a complicar su situación mental.

“Tambien no podía ver a su hija, la menor Juliana Avellaneda Bocanegra de 11 años, que su mamá no se la permitía ver y cada vez que hablaba con él se refería con palabras fuertes, obscenas, humillaciones y desprecios, comportamiento que también tenía su suegra, lo que afectó de manera drástica y llevó a un desorden emotivo y cognitivo de sus comportamientos y conductas”.

Y añadió que “estas causales afectaron la salud mental del señor Avellaneda, por lo que se requiere atención profesional especializada, remisión a institución psiquiátrica y medicación de carácter urgente, ya que tiene ideación suicida y puede llevar a cometer actos de autolesión y conductas irreversibles”.

Entre tanto, expuso que en julio se quedó sin empleo, lo que conllevó a también perder su hogar y consigo a esto, no le dejaban ver a su propia hija, lo que generó mayor frustración en el hombre de 37 años.

Adicionalmente, expresó que no tiene antecedentes ni anotaciones, es un hombre que nunca en la vida había tenido una situación penal.

Finalmente, Palacio solicitó a Avellaneda se le otorgue a una clínica psiquiátrica, en la que pueda ser tratado, ya que está en riesgo de intentar acabar con su vida.

Pese a esto, se le impuso medida de aseguramiento en centro carcelario.