José Arnobel Tapiero Bernal fue presentado ante el Juzgado Séptimo Penal de Garantías tras ser investigado por el feminicidio de su esposa, Lina Marcela Cañón Suaza, hecho ocurrido el 13 de septiembre del presente año en un lote ubicado en la parte alta del barrio La Gaviota de Ibagué, donde fue dejado abandonado el cadáver para tres días después del crimen, el hombre confesara en el bunquer de la Fiscalía lo que había hecho con su compañera sentimental, a quien luego de ser asesinada la había lanzado por un abismo.

La pareja llevaba conviviendo hace más de 5 años, pero hasta agosto de este año se comenzaron a evidenciar maltratos en contra de la víctima, cuando el hombre, por celos  la apuñaló delante de sus dos hijas de 2 y 7 años de edad, hecho que no fue denunciado.

Se conoció en la audiencia que algunos días antes del crimen, Lina Marcela abandonó su hogar y se fue para la casa de sus padres, pero hasta allí llegó su marido para convencerla a punta de mentiras para que regresara, consiguiendo su objetivo.

El 13 de septiembre, en horas de la tarde, el confeso asesino, se fue a dar una vuelta con la mujer y sus hijas, donde tumbó a su mujer, le puso su pie derecho sobre el pecho para evitar que se levantara y luego con una cuerda que llevaba para amarrar unos plátanos la estranguló y luego la lanzó por un abismo, crimen perpetrado delante de las pequeñas, asesinato que tres días después, José Arnobel Tapiero decidió confesar ante la Fiscalía.

Lina Marcela Cañón fue encontrada en avanzado estado de descomposición, mostrando signos de estrangulación en su cuello y huellas de presión en su pecho, lo que confirmaba la confesión de Tapiero.

La Fiscal del caso le imputó a José Arnobel Tapiero los delitos de violencia intrafamiliar agravada y feminicidio agravado, cargos que no aceptó, siendo cobijado con medida de aseguramiento de carácter intramural en centro carcelario.

Por: Juan Manuel Escobar, periodista judicial