Habitantes de la Arboleda Campestre Payandé dicen no aguantar más ante la falta del suministro de agua, inconveniente que se viene presentando desde que están viviendo en esa zona. 

“Llevamos 34 días de fuertes racionamientos de agua, en promedio nos podemos abastecer solo 1 hora diaria y anteriormente, habilitaban el servicio en la mañana, medio día y tarde con una duración de dos horas, pero las personas que viven en el cuarto piso no les llega el agua a la hora que la habilitan y en caso de que les llegue es con una presión muy bajita”, indicó.

En dicha urbanización la mayoría de personas se quieren ir de sus viviendas, debido a esta problemática, sin embargo, en algunos casos estas familias aún están pagando su crédito.

“En esta Semana Santa se les negó la visita a muchos familiares, por la falta de agua. Hemos tenido casos bastantes extremos como el de una madre de familia que tuvo que bañar con agua de la piscina a su hijo de 5 años y ahora, el menor presenta alergia en la espalda”, argumentó.

Por el mal servicio del agua, se están viendo perjudicados todos los habitantes de este conjunto y principalmente hay madres gestantes, personas discapacitadas, quienes no reciben una solución.

“Este es un impacto de forma negativa, porque el Ibal no brinda una respuesta formal directa, los directivos no vienen a dar la cara, solo envían de vez en cuando los carro tanques, pero no es lo suficiente, para abastecernos de agua”, mencionó.