La temporada invernal ha dejado hasta la fecha deslizamientos, caída de árboles, pérdida de 107 hectáreas de cultivos, colapso de vías secundarias y terciarias, 55 viviendas averiadas y 5 destruidas, dos personas han fallecido y dos mil más han resultado damnificadas.

Según informó Carlos Quiroga, secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo Líbano, Purificación, Cunday y Villahermosa han declarado la calamidad pública.

El funcionario recordó que el departamento está en alerta naranja y solicitó a los alcaldes activar los planes de contingencia y estar en constante coordinación y comunicación con los comités municipales y organismos de socorro, para cuando se presente alguna eventualidad, puedan tener los mecanismos y medios para tener una respuesta rápida.

Ante la magnitud de las emergencias los organismos de socorro mantienen la declaratoria de alerta roja y se encuentran en alistamiento permanente para atender cualquier situación.

Por: Paola Rojas Gómez, periodista regional.