En Valle de San Juan seis hacendados están reduciendo de manera significativa la capacidad del municipio para proveer un suministro de agua potable a las seis mil personas que residen en el casco urbano.

La denuncia la realizó el propio alcalde Héctor Orlando Padilla quien señaló que se tienen identificados a estos propietarios de grandes fincas quienes están instalando de manera ilegal tuberías para desviar el líquido a sus predios y suministrar el agua para más de 2.500 cabezas de ganado.

Esta práctica ha obligado al municipio a racionar el agua en plena temporada de verano donde las temperaturas superan los 37 grados, situación que tiene al borde del desespero a los habitantes de esta localidad del centro tolimense.

Por alarmante que parezca, esta problemática no es nueva pues este hecho se estaría presentando desde hace varios años sin que los organismos de control tomen medidas de fondo que permitan frenar este delito ambiental.

Según el mandatario, la administración municipal no puede actuar en este caso, pues los propietarios de los predios argumentan que debido a que la tubería atraviesa sus terrenos, están en su derecho aprovechar el recurso hídrico para sus intereses particulares.

Por: Paola Rojas Gómez, periodista regional.