La Personería Municipal intervino en este caso dejando unos compromisos claros con la comunidad, pues la planta compacta de tratamiento no tenía los niveles de calidad aptos para el consumo del líquido. Sin embargo, a la fecha no cuentan con este servicio y el dispositivo sigue consumiendo energía.

La Personería de Ibagué realizó una mesa con la comunidad de Altos de Miramar, pues desde que este proyecto fue entregado por la constructora no cuentan con servicio de agua potable.

De acuerdo con Sergio Andrés Gómez, personero delegado en servicios públicos, medio ambiente y control urbano, el agua que llega por medio de una planta compacta de tratamiento que instaló la constructora, no permite que el agua sea para el consumo humano, dado que no cuenta con los niveles de calidad requeridos por la Secretaría de Salud.

Igualmente, la comunidad ha pedido que se aclare la situación legal del acueducto que iba a proporcionar agua al conjunto, pues al parecer Cortolima habría permitido la perforación de una superficie para extraer el líquido preciado, la misma concesión le ha negado a la empresa realizar esta acción.

Igualmente, teniendo en cuenta que la planta no permite que el agua sea para el consumo, sigue conectada y generando gastos de energía, dejando así facturas de hasta $8 millones que la misma comunidad debe asumir.