Carlos Sepúlveda y su lucha contra el COVID-19

Carlos Ángel Sepúlveda se convierte en símbolo de este virus tras recorrer las calles de Ibagué entregando ese mensaje de autocuidado, sin imaginar que la enfermedad apagaría su voz para siempre.

Sepulveda 3

Carlos Sepúlveda, oriundo de Herveo,  laboró en Ondas de Ibagué y otras cadenas de gran prestigio como Caracol, RCN, Ecos del Combeima y en su cargo más reciente informaba a través de las cabinas de La Voz del Pueblo.

Además, su imponente voz también fue escuchada en el estadio Manuel Murillo Toro como animador del equipo de sus amores, el Deportes Tolima y en distintos eventos a nivel regional en los que su carisma hizo eco.

Este maestro de la radio fue insistente a través de los micrófonos con sus mensajes de prevención hacia el COVID-19 sin imaginar que el virus entraría a su casa a llevárselo para siempre. 

Incluso, días antes de ser internado en el hospital y con apenas pocos síntomas de gripe, creyó que la enfermedad pasaba desapercibida por su cuerpo debido a que no había perdido el olfato y su vitalidad parecía intacta. No obstante, ese enemigo silencioso al que llamamos Coronavirus ya tenía sentenciada su muerte pese a los cuidados que Carlos tuvo en casa y fuera de ella.

Así, creyendo que la muerte le era esquiva en esta época de pandemia, Carlos fue trasladado hacia la clínica Asotrauma de un momento a otro y con el pasar de los días el deterioro de su sistema renal y pulmonar ahogaron su voz hasta la eternidad. 

Su legado sin duda alguna vivirá para siempre, pero más allá de su pasión por los medios de comunicación y de ser la voz de la gente a través de los micrófonos, Carlos Sepúlveda es hoy el símbolo de lo desgarradora que se está volviendo la pandemia en el Tolima. 

En las calles, como como periodista, intentó sembrar en la ciudadanía esa responsabilidad social para combatir el Covid-19 usando los elementos de bioseguridad y respetando los protocolos. “A la gente hay que decirle: esto no es un juego. Esto es verdad, sigue matando a millones de personas”,  fueron las palabras de Sepúlveda  en un recorrido sobre la calle Tercera en medio de un informe periodístico sobre la velocidad del virus en Ibagué. 

Y así, con sus reflexivas palabras, extendemos nuestra voz de condolencia a su familia y le decimos a los tolimenses: el COVID-19 no es un juego.