El líder se encadenó para exigir a la empresa que le de solución definitiva al problema de aguas servidas en su barrio porque ya no aguantan más y exigen acciones definitivas.

Un grupo de habitantes del barrio La Pradera se tomó las instalaciones del IBAL en protesta por la falta de atención y el olvido en el que aseguran los tienen desde hace muchos años que vienen pidiendo les solucionen el problema de salubridad que tienen por cuenta de que es el sitio donde confluyen las cajas de las aguas servidas y no se aguantaron más.            

La comunidad acudió al centro de atención de la calle 41 con Quinta y respaldó a su presidente de junta de acción comunal, Jorge Tapiero, quien se encadenó y exigió respuesta inmediata de sus necesidades.

“No nos aguantamos más, hemos pasado miles de radicados, cartas, oficios, peticiones y no nos escuchan, por eso me encadené allá para pedir que atiendan el llamado y se comprometieron a venir este fin de semana. Si el lunes no nos han arreglado vamos a volver a protestar”, aseguró el Presidente de la JAC.

El hombre permaneció varias horas encadenado y al final consiguió que la empresa se comprometiera a tomar cartas en el asunto, pero asegura, que si este fin de semana no le dan arreglo definitivo, el lunes nuevamente van a protestar.