Por el delito de tentativa de feminicidio agravado, Luis Andrés Berrios fue imputado por la Fiscalía, al contar con suficientes elementos de prueba y evidencia física que lo relacionan con el hecho en el que fue herida de gravedad con arma blanca su excompañera sentimental el pasado mes de septiembre en Ibagué.

El hombre de 34 años quien no aceptó los cargos imputados por el delegado fiscal y fue cobijado con medida de aseguramiento en centro de reclusión, fue detenido por servidores de policía judicial en una labor interinstitucional CTI-Sijín en el barrio Independiente de la ciudad.

Se conoció en el desarrollo de las audiencias preliminares, que la víctima durante la relación sentimental con el capturado, fue sometida a ciclos de violencia sistemáticos comprendidos no sólo por agresión física sino también verbal y maltrato psicológico de lo que fueron testigo sus dos hijos menores de edad.

Su captura se produjo por un evento que al parecer ocurrió el 11 de septiembre cuando Berrios le pidió a su expareja que lo acompañara a hacer una diligencia pero antes debían esperar a un abogado por lo que se reunieron en un establecimiento público en donde ingirieron licor.

Presuntamente cuando la mujer dijo que se marcharía, al parecer el imputado no lo tomó de buena manera, la cogió del brazo con fuerza y la amenazó con golpearla con una botella si se iba; luego se la llevó hacia un motel en el barrio san Pedro Alejandrino.

Estando allí, cuenta la víctima en la denuncia que supuestamente la atacó con arma blanca en la parte baja de los glúteos, en el rostro y miembros inferiores, mientras le reclamaba porque había salido días antes con una amiga, y la insultaba.

El ataque del que fue víctima la mujer le generó 16 días de incapacidad, según dictamen de Medicina Legal.

Se tiene conocimiento que en el año 2014, supuestamente también la atacó al dispararle con una pistola de balines en medio de una discusión, con tan mala suerte que no resultó lesionada ella sino su hija de 3 años en el mentón.

Reposa en los archivos del ente acusador, otras denuncias de mujeres que tuvieron alguna relación sentimental con el procesado, por violencia intrafamiliar y de género. De igual manera pesa en su contra una sentencia condenatoria por tráfico de armas de fuego.

Por: Juan Manuel Escobar, periodista judicial.