El presidente del Concejo Municipal señaló que la “arrogancia” del ministro de Salud hace que se presenten la no aprobación de las reformas que necesita el país.

Tras hundimiento en el Senado de la República de la Reforma a la Salud del gobierno del presidente de Gustavo Petro, se empiezan a conocer diferentes reacciones de la clase política del Tolima e Ibagué. Así las cosas, el presidente del Concejo de Ibagué, Arturo Castillo señaló que la arrogancia no permitió el trámite del proyecto.

“Lamentable que un ministro de nuestro departamento no haya podido lograr un consenso en el Congreso, yo creo que a veces la arrogancia de nuestros ministros y secretarios de despacho aquí en la ciudad, permiten que no podamos discutir las reformas que son necesarias en el país”.

Asimismo, expuso que su colectividad no respaldó la reforma, aunque reconoció que si debe existir, esta debe ir consensuada con los diferentes sectores y movimientos políticos.

“Esta fue una reforma que el partido Conservador no apoyó, desde luego estamos de acuerdo con eso, pero también que muchos actores médicos y científicos decían que era una reforma que no beneficiaba al país y creemos que se puede reestructurar una buena reforma en los cambios que necesita el sistema de salud”.

Finalmente, expuso que en los gobiernos locales, departamentales y nacionales hay funcionarios nombrados que generan que las relaciones con el legislativo sean difíciles.

“En todos los gobiernos hay funcionarios arrogantes, a veces cuando hay ciertos ciudadanos que los nombran en un cargo se les olvida que son de libre nombramiento y remoción, que representan a una comunidad y un gobierno, lo que genera un rompimiento entre el ejecutivo y Concejo Municipal o en lo nacional entre los ministros y congresistas”.