Juan, María Victoria, Angie Valentina, David y Johan Arley, un grupo de cinco niños que no superan los 10 años, son el ejemplo en el municipio de Murillo, tras impulsar la siembra de 8.000 frailejones en bosques del Tolima.

Estos estudiantes de la Institución Educativa Lepanto, ubicada en la vereda La Cabaña, fueron inspirados por un incendio ocurrido en la zona que quemó varios árboles, además de numerables casos de deforestación acontecidos en su localidad. Ante los hechos, miembros del ejército construyeron un vivero en la escuela primaria, donde los cinco niños aprendieron sobre la flora de la región.

“La Fuerza Pública construyó el vivero en la escuela hace dos años, le proporcionamos a los niños el conocimiento técnico y así empezó esta historia de reforestación que propende proteger el recurso hídrico de nuestro departamento generando conciencia a través de las nuevas generaciones”, expresó la profesora Elicenia Casas.

Esta labor en beneficio del ambiente les ha permitido a los niños recibir reconocimientos, como la entrega de tablets para que continúen con el proceso de aprendizaje medioambiental.

“Queremos exaltar la labor que hacen, y además venimos a traerles unas tabletas para que sigan avanzando en estos procesos que contribuyen en la protección de nuestros recursos ambientales. En próximos días vamos a trabajar con ellos una importante iniciativa enmarcada en el reciclaje y energías renovables”, explicó Santiago Barreto, secretario general del departamento.

La actividad que realizan estos cinco menores es valiosa porque “de nuestra disciplina depende que este hermoso ecosistema se conserve para darnos agua por muchos años y así nuestras familias puedan cultivar”, asegura Valentina, una de las guardianas.